Si queremos que un cliente vuelva a comprar en nuestra tienda virtual y fidelice con la marca, un factor muy importante es el servicio de atención al cliente que haya recibido. Para ello, hay diferentes tipos: correo, mensajería instantánea, teléfono o utilizando alguna red social.
1.- Atención al cliente mediante el correo electrónico.
Es importante añadir un formulario de contacto en la web, en el que se incluyan, como mínimo, los campos obligatorios de nombre, correo y mensaje.
Esto ayudará a nuestros clientes cuando estén en nuestra tienda y necesiten que les sea respondida una pregunta de forma rápida y sencilla.
2.- Atención al cliente mediante la mensajería instantánea.
Este servicio de atención al cliente se asemeja al del correo electrónico y redes sociales, con la diferencia de que mediante chats de mensajería instantánea podemos enviar mensajes a tiempo real. Esto provoca que se produzca un intervalo mucho más reducido entre pregunta y respuesta y, así, poder resolver las dudas de los clientes rápidamente.
3.- Atención al cliente mediante el teléfono.
Se trata de añadir un teléfono de contacto y un horario de atención al cliente en el cual se puedan realizar llamadas. Quien se encargue de responder a estas llamadas, debe desprender serenidad y positividad a los clientes.
Si se aplica bien este servicio, podemos conseguir dar una respuesta a los clientes de una manera más directa y personificada.
4.- Atención al cliente mediante las redes sociales.
En este caso, los clientes se ponen en contacto con la tienda mediante alguna de sus redes sociales: Facebook, Twitter, Google +, etc.
Es importante responder a la mayor brevedad posible a los mensajes, pues los clientes empiezan a impacientarse a partir de los 30 minutos de espera, y la gran mayoría de las empresas suelen responder cada 6 horas.
En cualquiera de los casos, hay que tener en cuenta que la persona encargada de atender a los clientes debe ser una personada preparada para el puesto, con la capacidad de empatizar con ellos y de tratarles con educación.
Al fin y al cabo, la imagen que proyecte esta persona será la que tendrán los clientes de nuestra tienda online.